El día 11 de enero se realizó lo que el gobierno de turno ha querido llamar una inspección técnica a la mina de cobre. Se trata, a nuestro juicio, de una especie de bufonada, en la que incluso se vio al ministro de Comercio e Industria luciendo un casco con el rótulo de First Quantum – Cobre Panamá. Ni siquiera pudieron llevar un casco que tuviera nuestra bandera. ¿A que intereses responde ese ministro?
En realidad, se trató de una especie de tour en la que la voz cantante la llevaron los funcionarios de Cobre Panamá. Así se desprende del comunicado de prensa de Cobre Panamá fechado el 11 de enero. En este se afirma que los técnicos de Cobre Panamá “mostraron a los asistentes los mecanismos implementados para realizar las arduas tareas de preservación y gestión segura de las condiciones ecológicas y ambientales, así como las áreas de infraestructura e instalaciones del sitio de la mina”. Más adelante el comunicado reitera que: “durante la visita se realizó un recorrido exhaustivo por todas la áreas e instalaciones solicitadas por los asistentes, destacando los métodos de aplicación de medidas de estabilidad ambiental e integridad de activos, que se han implementado en base a la experiencia y conocimiento del sitio por parte de Cobre Panamá”.
De lo anterior surge una pregunta: ¿los asistentes fueron a cuestionar a la empresa que ha venido funcionando ilegalmente en el país en donde el fallo de la Corte señala 25 artículos de la Constitución violados o a recibir una lección de la transnacional?
Lo peor del caso es que una solo organización la UICN, quien ha intentado apoderarse de la representación de la población en el cierre de la mina y que ha querido minimizar los problemas calificándolos de puramente técnicos, decidió la representación de los 11 veedores de la población que asistieron a la inspección- tour.
Surgen varias preguntas: ¿Por qué las organizaciones asistentes no plantearon que cualquier participación ciudadana debería ser presidida por la renuncia del ministro de medio ambiente?; ¿Por qué no exigieron que cualquier participación ciudadana debe ser en el plano de las decisiones vinculantes y no como simple veedores (una especie de mirones sin capacidad de decisión) ?; ¿Por qué los sabios de la UICN no han producido a esta altura una imagen – objetivo (visión) que sirva de guía al cierre de la mina?; ¿Por qué en los medios solo aparecieron las voces oficiales?
A final de cuentas se tiene que entender que errores, aunque sean por omisión, que comprometan la unidad que mostró la población durante las manifestaciones en defensa del Medio Ambiente y la Soberanía de Panamá solo favorece a la minera y su cómplice, el gobierno de turno.
Por: Juan Jované. Economista y político panameño, profesor catedrático de la Universidad de Panamá.
Last modified: 12/01/2024