El 30 de marzo de 1976, la sociedad palestina convocó una huelga general en protesta por el continuo robo de sus tierras por Israel. En esa fecha, el Ejército sionista asesinó a siete jóvenes palestinos con «ciudadanía israelí», que se manifestaban para detener la confiscación de 21.000 dunums (2.100 hectáreas) de tierras palestinas por Israel,