El 14 de julio, mientras la Amazonía ecuatoriana enfrentaba el caos, el pánico y el miedo provocado por la crisis sanitaria del COVID-19, la empresa minera canadiense Solaris Resources celebraba su cotización en la Bolsa de Valores de Toronto (TSX-V). Luego lanzó una campaña en Twitter para alardear de sus “exitosas alianzas comunitarias” en torno