Miles de hondureños y hondureñas volvieron a encender sus antorchas y a movilizarse en Tegucigalpa. La impresionante movilización llegó a pocas cuadras de la residencia del presidente Juan Orlando Hernández, quien prefirió abandonar el lugar en helicóptero. Sucesivamente fue llevado a un lugar desconocido, protegido por una columna de vehículos