En la mayoría de los bicentenarios estados de Abya Yala, la declaratoria del confinamiento “obligatorio”, incluso con el uso de la fuerza, ya lleva más de dos meses. Y los impactos en los pueblos indígenas son crecientes. Las empresas nacionales y transnacionales no han parado sus actividades, sólo redujeron personal y horarios. En muchos casos,