Perspectiva socioambiental del mes
Desde inicios del año 2017 el Observatorio Socioambiental de Panamá advierte con suma preocupación el aumento de los conflictos socioambientales por el acceso a los recursos naturales. Los conflictos socioambientales “son luchas sociales generadas por los efectos de la contaminación o por los sacrificios causados por la extracción de recursos naturales. También pueden ser casos de injusticias ambientales relacionadas con el acceso a recursos o servicios ambientales o por recibir la contaminación”. Este es un fenómeno también político y comprende aspectos relacionados con el espacio, el territorio y la población que en el habita.
El OBSAOP identifica en Panamá los siguientes conflictos socioambientales: conflicto hidroeléctrico, conflicto minero metálico y no metálico, acaparamiento territorial (bosques y humedales), monocultivo, soberanía alimentaria, turismo inmobiliario, conflicto por el agua y la criminalización de la protesta social que trae como consecuencia la violación de los derechos humanos.
Básicamente, los conflictos socioambientales señalados, además de ser complejos, obedecen a la dinámica económica y el modelo de desarrollo imperante o al denominado interés nacional con relación al interés regional o local, que tiene como resultado la toma de decisiones del gobierno y las empresas, aunada a la flexibilidad de la gestión institucional ambiental y la corrupción, que acentúan la contaminación y destrucción de los diferentes ecosistemas como los bosques, el agua, los humedales, etc. Al respecto, cobra fundamental importancia que se tomen acciones firmes debido a la falta de reconocimiento existente en relación al peligro en su vida, honra y bienes de que son objeto los activistas y líderes comunitarios que defienden el ambiente en nuestro país.
Las controversias expuestas, que evidentemente han generado una creciente reacción ciudadana, ponen de relieve como una prioridad mayor frente a los organismos de decisión, que es necesario fortalecer la participación ciudadana y la gestión ambiental de las comunidades mediante una nueva forma de ver el mundo, más humana, con equidad y armónica con la naturaleza.
En tal sentido, Panamá es un país con una gran cantidad de conflictos socio-ambientales que se extienden por toda la geografía nacional. En 1947 más del 70% de la superficie del país estaba cubierto por Bosques. Para 1990 se redujo al 43% para la presente fecha los datos de la ANAM no parecen ser confiables. Lo que sí es real es que el deterioro del medio ambiente es cada día mas profuso y no existe en este un planteamiento serio detenerlo.
El fondo del problema es de naturaleza política y producto de la mercantilización del medio ambiente y por tanto de la naturaleza. Karl Polanyi (1886-1964) economista y antropólogo austro-húngaro, señalaba en sus obras que la concepción económica liberal habían mercantilizado tres elementos que no lo eran: La naturaleza, el dinero y el trabajo.
El ser humano satisface sus necesidades con los recursos de la naturaleza y sin ella la vida no es posible. Pariendo de lo anterior la naturaleza no es mercancía. Este criterio no se comprende en los círculos económicos de Panamá porque el problema parte de su enfoque de ver la vida y el mundo.
En Panamá no existe un plan nacional de desarrollo económico y social en donde la conservación del entorno ambiental juegue un papel fundamental. Y esta ausencia de políticas públicas orientadas en ese sentido es la principal responsable de los conflictos ambientales.
El concepto de desarrollo sustentable que consiste en que se debe aprovechar los recursos de la naturaleza sin aniquilarla no será posible sin un cambio político de fondo, Ya se cuenta con la tecnologías para un desarrollo sustentable pero no se implementan porque a los sectores de poder no les interesa.
Equipo Interdisciplinario OBSOAP
Descargue documento: Observatorio Socioambiental de Panamá OBSOAP Edición # 14. Enero 2017
Last modified: 16/02/2017