Un gran escándalo sacude a Panamá, o quizás sacude a los grandes poderes económicos de Panamá y del mundo, así como lo demuestra los medios de información global. Luego que el diario alemán Süddeutsche Zeitung obtuvo 2,6 terabytes de datos, más de 11 millones de documentos secretos sobre transacciones opacas de algunas de las personalidades más ricas, y compartida por The International Consortium of Investigative Journalists (ICIJ).
Sin embargo, algunos medios tradicionales o ligados a sector económico y político, han sido muy tibios en el cuestionar el modus operandi y los actores intelectuales — consorcios de abogados — de la gran operación fraudulenta que ejercían desde la creación de la ley de sociedades anónimas. Igualmente, de forma usual y poco imparcial algunos medios locales cedieron a darle espacio a representantes de la banca financiera, firmas de abogados y políticos evasores, que siempre han transado a costa de fisco nacional y pueblo panameño. Firmas de abogados, que además que se prestaron para hacer sociedades anónimas, se ofrecieron para el trafico de influencias para que proyectos mineros, hidroeléctricos, turístico inmobiliario y de extracción de bienes ecológicos pudieran libremente entrar al mercado del saqueo en Panamá.
Los Papeles de Panamá es una gran golpe a la columna de evasores de impuestos y saqueadores de las riquezas de los países, en que sus líderes políticos, burlaron la voluntad de las mayorías en los comicios electorales.
Este gran escándalo rebasa las filtraciones de Edward Snowden y los cables de Wikileaks de cuando pone al descubierto datos sobre empresas en paraísos fiscales que procede del despacho de abogados panameño Mossack Fonseca, especializado en crear sociedades mercantiles ‘offshore’. Sin embargo la firma Mossack Fonseca niega la mayor y asegura que las personalidades que aparecen en los papeles no son clientes de la firma. Cuestión que podemos señalar que estos datos solo fueron obtenidos de esta firma, sin embargo son muchas las firmas de abogado que operan estas sociedades anónimas.
Mossack Fonseca es considerado uno de las cinco mayores firmas “mayoristas” del mundo de secretos offshore. Cuenta con más de más de 500 empleados y colaboradores en más de 40 oficinas en todo el mundo, incluyendo tres en Suiza y ocho en China, y en 2013 tuvo una facturación de más de 42 millones de dólares.
Este asunto trata sobre del mundo de la evasión fiscal y los paraísos fiscales, que según datos de la Instituciones Financieras Internacionales IFIs, ONU y los bancos centrales, esconden entre 21 y 32 billones de dólares, mediante bufetes de abogados en pequeña países del Caribe (y Estados de EEUU) que “lavan” el dinero de los súper ricos.
Hay que destacar Jurgen Mossack llegó a Panamá en la década de 1960 y en el marco de la Segunda Guerra Mundial, en donde su padre había servido a la Waffen-SS nazis o policía del partido Nazi de acuerdo con los archivos de inteligencia del Ejército de EE.UU. obtenidos por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ). Una vez en Panamá, el viejo Mossack se ofreció a la CIA para espiar a los comunistas en Cuba
Las transacciones que se reflejan en los Papeles de Panamá son legales, sin embargo dan luz sobre la compleja red de sociedades offshore que propician el terreno perfecto para la evasión fiscal.
Ante dicho escándalo en muchos países, han procedido a investigaciones para determinar si las personalidades y empresas mencionadas incurrieron en delitos fiscales.
El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, en inglés) es un colectivo de 190 periodistas que en más de 65 países buscan desenterrar delitos internacionales, corrupción y abuso de poder.
Este es un reporte especial del equipo de investigación de Radio Temblor, medios alternativo del Colectivo Voces Ecológicas COVEC de Panamá
Last modified: 05/04/2016