A menudo, vemos empresas que dicen ser ecológicas en su publicidad, pero en realidad no lo son. Esto se llama “greenwashing”. El “greenwashing” es una práctica en la que las empresas intentan hacer creer a los consumidores que son más ecológicas de lo que realmente son. Esto lo logran a través de campañas publicitarias, afirmaciones en el empaque de los productos o mediante otras estrategias de marketing. Sin embargo, detrás de estas afirmaciones, muchas veces no hay acciones concretas que respalden el compromiso ambiental de la empresa.
Por ejemplo, una empresa podría afirmar que está comprometida con la sostenibilidad porque utiliza materiales reciclados en sus productos, pero en realidad, la mayor parte de su producción sigue siendo altamente contaminante. Otra táctica común es realizar campañas publicitarias “verdes” para distraer la atención del público de un historial ambiental negativo.
Casos como las falsas soluciones al cambio climático y su mercado de carbono ahora convertido en una plataforma del negocio con el clima. También el iluso marketing de la minería sostenible, responsable, amiguísima con el ambiente o verde.
Para evitar caer en esta trampa, las empresas deben ser honestas sobre su impacto ambiental y comprometerse a mejorar. Deben usar afirmaciones específicas y respaldadas por datos. También es importante considerar todo el ciclo de vida del producto y obtener certificaciones de terceros. Un enfoque basado en la ciencia puede ayudar a establecer objetivos reales y medibles.
Las marcas que realmente se preocupan por el medio ambiente no solo hacen “marketing” ecológico, sino que también actúan de manera responsable todo el año. Los consumidores quieren marcas honestas y comprometidas con el medio ambiente. Al permitir que las empresas continúen con prácticas insostenibles sin repercusiones, se perpetúa el daño ambiental en lugar de abordarlo de manera efectiva, hay que dar conocer esta verdad oculta, porque si no el planeta agonizará de tanta sobreexplotación camuflajeada.
Es importante que los consumidores estén alerta ante el “greenwashing” y busquen información adicional sobre las prácticas ambientales de las empresas antes de tomar decisiones de compra. Del mismo modo, las empresas deben ser transparentes y honestas sobre sus acciones ambientales y comprometerse genuinamente a mejorar su huella ambiental en lugar de simplemente utilizar estrategias de marketing engañosas.
Por: Iris Gómez Robles. Bióloga / Colectivo Voces Ecológicas COVEC
Last modified: 26/03/2024