Salvador Nasralla, histriónico conductor de programas deportivos, fue el candidato presidencial de la Alianza de Oposición contra la Dictadura. En una entrevista brindada en exclusiva a La Rel, Nasralla dice estar seguro que la crisis post electoral está lejos de terminar y que el pueblo nunca aceptará a un presidente que usurpa el poder.
-La OEA acaba de publicar un comunicado donde dice que trabajará de cerca con las nuevas autoridades electas. ¿Le sorprendió esta decisión?
-Me he comunicado con el secretario general Luis Almagro y me ha asegurado que la OEA no se retracta de lo que dijo en su informe. Sin embargo, siento que los de la OEA son empleados y hacen lo que su jefe les dice.
En este caso, el jefe es quien financia un gran porcentaje del presupuesto de la OEA, es decir los Estados Unidos.
Independientemente de que hoy (martes) se haya instalado el nuevo Congreso y que el sábado Juan Orlando Hernández tome posesión de su cargo, el pueblo no los va a acompañar y ellos no van a poder gobernar.
-¿Todavía tiene confianza en estos organismos multilaterales?
-La crisis va a continuar y tengo confianza que, tanto la OEA como la ONU, cuando vean que en Honduras no hay posibilidad de garantizar la gobernabilidad, reaccionen y tomen cartas en el asunto.
-¿Qué papel ha jugado Estados Unidos en esta grave crisis post electoral?
-Cuando yo no estaba metido en política, realmente pensaba que los países elegían a sus gobernantes solos. Pero no es así. Prueba de eso es el aval que la Embajada estadounidense dio al robo electoral que sufrí tanto en 2013 como ahora.
Pero no pueden ir en contra de lo que quiere el pueblo. Si el reclamo y la protesta continúan, los Estados Unidos se verán obligados a quitarle el apoyo a Juan Orlando Hernández, y él tendrá que irse.
Espero que el sábado 27 de enero sea una jornada de protesta en todo el país, y que la gente salga masivamente a manifestar su inconformidad. Yo voy a andar en las calles acompañando la protesta.
Va a ser una clara demostración de la voluntad popular y de que el pueblo no está respaldando a Hernández.
-¿Hay posibilidad de revertir esta situación?
-Esto no depende de mí, sino del pueblo. Ayer hubo tomas y protestas en varias partes del país, se cerró la frontera con Guatemala. Estos son ejemplos de ingobernabilidad e inconformidad.
Si esta situación persiste durante los próximos meses, los organismos internacionales multilaterales tendrán que tomar medidas.
Un país militarizado
Un pueblo en las calles
-¿Por qué los Estados Unidos boicotean su victoria?
-De verdad que no lo entiendo. Yo no soy izquierdista, ni sigo ninguna ideología. Lo único que persigo con mi programa de gobierno es que la gente tenga mejor calidad de vida, generar empleo, reducir la pobreza, lograr que Honduras tenga un presidente que no sea ladrón.
Yo no me metí a esto por dinero, ni para hacer negocios. Quiero hacerlo bien, no como los últimos dos gobiernos que han quintuplicado la deuda pública.
-También hay una crisis de derechos humanos en el país. Más de 30 muertos y cientos de heridos y detenidos.
-La situación de derechos humanos es muy grave. Juan Orlando Hernández ha militarizado el país y ha tratado, sin lograrlo, de elevar la Policía Militar a rango constitucional.
Los que se están cometiendo son crímenes de lesa humanidad y, al igual que otros dictadores del mundo, más temprano que tarde Juan Orlando Hernández tendrá que pagar por ellos.
-¿Cómo calificaría el gobierno de JOH?
-Fue un gobierno muy malo. Logró intimidar a la empresa privada, concentró el poder y mantuvo una actitud de terror. Tampoco pudo reducir la pobreza, antes bien la incrementó.
Dice que mejoró la economía, pero esto no se refleja en la calidad de vida de la inmensa mayoría de las personas. ¿De qué me sirve que la economía crezca y que haya buenos datos macroeconómicos si la pobreza aumenta?
-¿Qué jornada espera el próximo sábado?
-Espero que sea una jornada de protesta y lucha en todo el país. Nos mantenemos firmes condenando el fraude. Tanto la OEA como la ONU y el Departamento de Estado de Estados Unidos saben lo que pasó. Les hemos entregado las pruebas.
A partir de entonces hemos recogido nuevas pruebas. Se trata de un fraude monumental de casi medio millón de votos. Seguimos exigiendo una auditoría forense internacional de todo el sistema informático del Tribunal Supremo Electoral.
Juan Orlando Hernández no va a poder gobernar y más temprano que tarde va a caer.
El pueblo nunca reconocerá a un presidente que está usurpando el poder.
Por: Giorgio Trucchi | Rel-UITA
Last modified: 24/01/2018