En horas de la tarde de ayer representantes de las trabajadoras sexuales, agrupadas en la organización Mujeres con Dignidad y Derecho de Panamá (MDDP) convocó a una marcha pacífica partiendo de la 5 de mayo hacia la estación de policía de Ancón. A la misma se le unieron en apoyo otras asociaciones y sindicatos como Espacio Encuentro de Mujeres (EEM), Central Sindical de Trabajadores Convergencia Sindical, Asociación de Hombres y Mujeres nuevos de Panamá (AHMNP), Asociación de Estudiantes de Sociología de la Universidad de Panamá, Asociación de Personas Trans, entre otras.
Para la realización de la misma la organización convocante había enviado una carta informando de la actividad tanto a la Autoridad del Tránsito, a la Policía Nacional y a la Alcaldía, donde se detallaba la ruta y que se haría de manera pacífica. Pero sorpresivamente la policía y su cuerpo élite “Fuerza Águila” proceden de manera arbitraria y violenta a detener a varios de los manifestantes sin mediar palabra, bajo la falsa acusación de que estaban obstruyendo la vía pública. Algo totalmente alejado de la realidad ya que se ha podido contrastar con el material visual grabado antes de la detención y se podía observar que se encontraban en las aceras con pancartas, esperando al comisionado de la Policía Nacional, Omar Pinzón para que los atendiera y entregarle un comunicado donde se denunciaba el abuso policial, el constante acoso y extorsión de estos agentes contra las personas que se dedican por voluntad propia a este trabajo.
Las personas arrestadas fueron: Gladys Murillo, Irina Ceballos, Maritza Rodríguez (MDDP), Isabel Guzmán, Eduardo Gil (Convergencia Sindical), Venus Tejada (Asoc. de personas Trans), Sharon Pringle, Juana Camargo, Eusebia Solís (EEM), Ricardo Beteta (AHMNP), Ovidio Cárdenas, Iris Reyes y Patricia Townsend. Quienes estuvieron detenidos de manera injusta en la sede policial de San Miguel, esperando ser llevados a un juzgado nocturno para levantarle falsos cargos de “alteración del orden público”, pero gracias a la intervención solidaria de abogados, compañeros/as y del Rector de la Universidad de Panamá, fueron liberados en horas de la noche.
Una vez más con esta acción, la Policía Nacional reafirma su verdadero papel, el cual es reprimir al pueblo y salvaguardar los intereses de las clases dominantes.
Desde hace muchos años las trabajadoras sexuales están luchando porque se le reconozcan sus derechos a ejercer esta profesión por voluntad propia y salir de la clandestinidad.
Informó Dania Batista Guevara
Last modified: 03/06/2017