Ante la recesión mundial que ha provocado la caída de los precios de las materias primas provenientes de la minería y de cara al descalabro ambiental provocado por las empresas mineras a nivel nacional, las organizaciones que integramos la Plataforma de Movimientos Sociales y Populares en Honduras (PMSPH) exigimos el fin de las concesiones mineras, el resarcimiento inmediato de daños directos y colaterales a las comunidades y castigo a los asesinos de dirigentes indígenas, afrodescendientes y comunitarios cometidos por sicarios, policías y militares al servicio de las empresas mineras.
Condenamos la actitud de “falsas víctimas” con que en estas últimas semanas se han estado presentando varios empresarios mineros, aduciendo pérdidas irreparables, pidiendo además al Estado que les condone los pagos de servicios públicos y les exonere de los espúreos impuestos que pagan a las municipalidades. Falsas y perversas soluciones a las que el presidente ha respondido con extrema benevolencia y a quienes el presidente ha atendido con mucha más prontitud que a las comunidades afectadas por la minería, a quienes más bien ha acusado de oponerse al desarrollo. Denunciamos semejante descaro de parte de autoridades de gobierno y de empresarios mineros que no es más que un nuevo atraco a la débil economía nacional.
Desde la PMSPH consideramos, más bien, que este es el momento para que el Estado de Honduras declare nulas todas las concesiones mineras por convertirse en inversiones fallidas que laceran los intereses económicos de la nación hondureña, además de ser ecológicamente depredadoras justamente cuando tenemos que prepararnos para afrontar el cambio climático y socialmente injustas al condenar a la muerte y al despojo a las comunidades.
No más tragedias ambientales como las vividas en las minas de San Andrés, no más contaminación, despojo y ruina económica para habitantes como los de las comunidades que circundan la mina El Venado entre Olancho y Colón, no más jóvenes practicantes de la minería artesanal torturados por militares como ocurrió en El Corpus, no más indígenas asesinados por sicarios al servicio de las minas de Antimonio en el pueblo Tolupán.
Rectificación honrosa con resarcimiento de daños provocados, justicia con castigos a funcionarios y empresarios responsables de delitos ambientales y paz y desarrollo para los pueblos, aldeas y caseríos de Honduras.
San Pedro Sula, 25 de febrero de 2016
Last modified: 28/02/2016