Los desastres se hacen cada vez más comunes. Tanto que, gradualmente, los vamos haciendo parte de la rutina de cada año. En verano, sequías, olas de calor e incendios forestales; en invierno, intensas lluvias, deslaves, inundaciones y procesos de erosión. Mientras la Crisis Climática se acentúa y se incrementa, las anomalías climáticas se hacen más