Perspectiva socioambiental del mes / Análisis de coyuntura
En el mes de febrero, el Observatorio Socioambiental de Panamá documenta la íntima relación entre los extractivismos y la corrupción, el caso de la hidroeléctrica Chan II es un claro ejemplo, en que los sobornos y la asistencia del Estado fueron la tónica, aunada a la imposición del proyecto. Ningún país está a salvo de estos problemas.
Por otro lado, los temas de la seguridad alimentaria de los panameños y la seguridad de los productos nacionales son temas que cobran particular relevancia en este mes. Al respecto, se discute un proyecto de ley que “establece los requisitos para la importación de productos agropecuarios para garantizar la seguridad alimentaria del país, la cual se debe realizar de forma programa y que no afecte los productores nacionales”. Lo anterior demuestra que resulta importante una política alimentaria nacional y el diseño de políticas dirigidas a la producción y mercados locales de alimentos a precios accesibles, al igual que una estrategia de desarrollo de alternativas en el marco del manejo sostenible de los recursos naturales.
La seguridad hídrica de la población sigue siendo un tema de discusión clave como un paradigma de los objetivos estratégicos de la gestión del agua. Si bien es cierto, debido a la presión ciudadana se obtuvo una sentencia de la Corte Suprema de Justica favorable que deroga la resolución que limitaba el flujo del caudal de un río al 10% para los usos consuntivos de las comunidades y que el 90% quedaba libre para ser usado en grandes proyectos. Este es un logro parcial, toda vez que se requiere que el Ministerio de Ambiente en base a criterios técnicos y científicos fije un caudal ecológico que atienda a un nivel aceptable de cantidad y calidad de agua para la población, su subsistencia, los ecosistemas y la producción; por lo que la participación ciudadana continúa siendo un factor clave y decisivo para integrar las distintas dimensiones que caracterizan la función de los recursos hídricos en relación con la sociedad y el medio ambiente, pero esencialmente el respecto al derecho humano al agua.
En otras cosas, el OBSAOP advierte con gran preocupación y condena el hecho de que los defensores de los derechos humanos y ambientales siguen siendo perseguidos en su vida, honra y bienes, como suele ocurrir cuando se buscan motivos infundados para criminalizar la protesta social y su liderazgo, lo que pone de relieve que el gobierno no está creando espacios seguros para que los activistas expresen y denuncien públicamente los proyectos que afectan la calidad de vida de la población y la protección de los recursos naturales. Por lo anterior, el OBSAOP exige enfáticamente que el gobierno panameño cese las presiones y hostigamientos de que son objeto los activistas ambientales en la lucha por sus legítimas demandas.
Equipo Interdisciplinario OBSOAP
Descargue aquí: OBSOAP. Febrero. 2017
Last modified: 28/03/2017