A pesar de las protestas contra el nuevo contrato minero entre el Estado panameño y Minera Cobre Panamá (First Quantum Minerals), el mismo fue aprobado en tercer debate con 44 votos a favor, 6 en contra y 2 abstenciones por parte de los diputados de la Asamblea Nacional. De ahí fue rápidamente sancionado por el Presidente Laurentino Cortizo y publicado en la Gaceta Oficial, todo el día viernes 20 de octubre.
Frente a tal atropello a la voluntad popular, el pueblo panameño a través de gremios, asociaciones, sindicatos, indígenas, estudiantes universitarios y sociedad civil en general está manifestándose en diversos puntos del país con piqueteros, vigilias y cierre de vías. Por su parte, algunos gremios docentes y de trabajadores están haciendo llamados a sus bases a una asamblea general para tomar decisiones de las próximas acciones, que posiblemente sea un paro nacional como el que se vivió en julio del año pasado.
Por otro lado, en áreas cercanas a la mina, en la ciudad de Penonomé, un grupo de trabajadores de la mina marcharon en la interamericana a favor de que se aprobara el controversial contrato. A lo que surgen preguntas sobre el mismo: ¿Cuánto les durará ese trabajo?, ¿Quién les da seguridad que permanecerán allí y no los despedirán? Con la firma del contrato se espera que contraten más extranjeros.
Además, los mismos trabajadores denuncian violaciones a sus derechos y la frase tan trillada de “minería responsable” es solo un cuento que el pueblo panameño no se traga. Muchos solo están ahí por la necesidad de trabajar. Denuncian que cortan árboles enormes, donde hay animales que viven ahí y mueren aplastados. El Ministerio de Ambiente solo ha servido para blanquear las actividades de la minera y ha callado ante tales daños ecológicos y ambientales.
El pueblo panameño considera que, si los diputados de la Asamblea y el Presidente hicieran en menos de días, para otros proyectos que realmente valen la pena para los intereses de la nación, se lograría un país diferente, con una verdadera democracia. Pero desafortunadamente, todo se basa en el vil dinero, el tener y poder. Es un secreto a voces que para la aprobación del nuevo contrato minero hay intereses y dinero por delante, lo que permitió que se vendiera una vez más a la patria, donde agarraron nuevamente espejitos por oro, sin importar las consecuencias.
Vendrán más enfermedades, escasez de agua, muertes que tratarán de ocultar, eximiendo a la minera de las sustancias nocivas, animales que lentamente se extinguirán porque su hábitat se está dañando y al migrar a otros lugares los matarán porque lo verán como amenaza, hará menos lluvia por la tala indiscriminada de árboles acelerando los efectos del cambio climático.
No se escuchó la voz del pueblo, el clamor de los campesinos que se ven usurpados, engañados y ultrajados.
Si un presidente NO cuida a su pueblo menos lo hará una empresa que quiere dejar al país sin nada.
Panamá vale más sin minería…
No a la minería…
Como dueles Panamá…
Por: Iris Gomez Robles. Bióloga Colectivo Voces Ecológicas COVEC
Last modified: 22/10/2023