A 49 años de la desaparición del sacerdote Héctor Jesús Gallego en Santa Fé de Veraguas, organizaciones sociales mantienen su lucha por encontrar su cuerpo, la cual fue desaparecido en ese entonces por la Guardia Nacional y el Estado Mayor. Pese a la pandemia, que ha desmovilizado a las personas, están suspendidas las actividades conmemorativas. Pero se recuerda, y continúa su legado, por la justicia social.
Héctor Galllego de origen colombiano llegó a Panamá, procedente de Colombia en 1967. Trabajó en los campos de Santa Fe de Veraguas, luchando contra las injusticias y los abusos de los terratenientes, organizando a los campesinos en cooperativas, llevando la Palabra de Dios a todas las comunidades, denunciando en los medios de comunicación las situaciones injustas.
El singular sacerdote fue secuestrado la noche del miércoles 9 de junio de 1971, en la comunidad campesina veragüense de Santa Fe, según versiones fue asesinado aquella misma noche.
Cuando empezaba a escribirse el martirologio de la Iglesia latinoamericana, entre los caídos de la primera hora, a sus 33 años, Héctor Gallego fue pionero sin pretenderlo.
Escuchemos a Francisca Rodriguez lideresa campesina de la comunidad de Las Mendozas del Distrito de San Francisco y de la Red Ecológica, Social y Agropecuaria de Veraguas RESAVE.
Actualmente el poblado de Santa Fé, se encuentra a la expectativa por las amenazas de proyectos depredadores como el negocio para acaparamiento de tierras, minería y represas. Y el campesinado mantiene su lucha y esperanza, impulsando alternativas a través de un verdadero dialogo.
Colectivo Voces Ecológicas COVEC
Last modified: 11/06/2020