Valle de la muerte
Con profunda indignación recibimos la noticia de otra tragedia provocada por la empresa minera. En la tarde de hoy (25/01/2019), dos presas se rompieron situadas en la comunidad Corriente del Frijol, en Brumadinho, región metropolitana de Belo Horizonte (MG). Aún no tenemos información sobre el número de víctimas, pero según los bomberos, cerca de 200 personas están desaparecidas. Hay informes sobre la llegada de material tóxico al río paraopeba, afluente de San Francisco. La dimensión completa de este desastre aún no puede precisarse.
La articulación internacional de los afectados y afectados por vale viene denunciando en los últimos años en la asamblea de accionistas de la compañía el peligro del reiterado proceso de reducción de costes y gastos en sus operaciones, ampliando así los riesgos y los incidentes como lo ocurrido en mariana en 2015 y hoy en brumadinho. Sin embargo, no se ha hecho nada. No se puede decir que la ruptura de las represas, el día hoy, no era previsto o esperado: a pesar de alertada, la vale nada ha hecho más que seguir escarbando y aumentando su beneficio.
Brumadinho está a 149 km de Mariana, epicentro de la ruptura de la presa de fundão, otro crimen bárbaro involucrando a la minera vale, que tomó la vida de 19 personas, y afectó a miles en la Cuenca del río dulce, que sufren hasta hoy con EL DESCUIDO DE LA VALLE S.A. que no indeniza ni reconoce el derecho de las personas afectadas.
Además de la evidente responsabilidad de la empresa, entendemos que el estado brasileño es también responsable de las violaciones de los derechos humanos de los afectados por la ruptura de se destaca que la autorización de funcionamiento de represas de rechazo de mineral – tecnología prohibida en varios países – la no vigilancia de sus instalaciones y la no responsabilidad de las empresas minería por los daños a que dan causa representan una verdadera omisión de las autoridades brasileñas que permite que Las violaciones se repitan. Se desprende que incluso después de tres (3) años del crimen de la Cuenca del río dulce, el valle no ha sido debidamente responsable y los afectados siguen luchando por justicia.
Y ahora, el valle de nuevo figura en una nueva tragedia social y medioambiental. Es urgente que las autoridades del estado brasileño asuman sus responsabilidades y inicien una investigación rápida, imparcial y efectiva para que casos como estos no corran más. Además de promover el control de todas las represas de rechazo del país, para evitar nuevas interrupciones y tragedias.
Nos solidarizamos con todos los afectados y afectados y nuevamente gritamos: no fue accidente!
Articulación internacional de los afectados y alcanzados por la vale
Last modified: 25/01/2019